.

.

lunes, 6 de junio de 2011

#14

Y es que solo hay que tener suerte. Cuando conoces a la persona idonea todo es mejor, todo es más fácil, es más sencillo, más bonito, perfecto... Llamalo casualidad o incluso si quieres destino. Pero cuando llega, lo último que quieres es perderle. Y haces lo que sea para que sea infinito.

No hay comentarios:

Publicar un comentario