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martes, 7 de junio de 2011

#16

Soltarlo todo.
Desahogarte y decir todo lo que piensas. Quedarte seco de tanto hablar y sentirte mejor  contigo mismo después de soltarlo. Te quitas un peso de encima, como si hubieras llevado durante años un burro en la espalda.  Te alivias sí, pero muchas veces puede salir mal parado. A veces hay que pensar y aprender a morderse la lengua.

2 comentarios:

  1. No está mal Marta, me has sorprendido,jajaja.
    Me gusta tu blog igual o más que el otro pero yo creo que tienes razón, aunque las entradas son más cortas, yo creo que están mejor que las otras.

    Has mejorado mucho desde que empezaste.

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  2. Mas concentradas JAJAJAJAJA :)
    Gracias Victor :)

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